11 ESTRELLAS, 11 ESPIGAS
José era uno de los doce hijos de Jacob, y su padre lo amaba más que a sus otros hijos. Debido a esto, los hermanos de José se pusieron celosos y lo vendieron como esclavo a unos mercaderes de Egipto.
Después de varios años, José se convirtió en el gobernador de Egipto y sus hermanos tuvieron que ir a Egipto para comprar comida durante una hambruna. Cuando llegaron, José los reconoció, pero ellos no lo reconocieron a él.
En ese momento, José decidió poner a prueba a sus hermanos para ver si habían cambiado. Ordenó que los acusaran de ser espías y los encerró en la cárcel durante tres días. Al tercer día, José les dio la libertad, pero mantuvo a uno de ellos, Simeón, como rehén.
Antes de que los hermanos regresaran a Canaán, José les dio un poco de comida y dinero, pero también escondió una copa de plata en el saco de uno de ellos. Cuando los hermanos se dieron cuenta de la copa desaparecida, regresaron a Egipto para encontrar a Simeón y devolver la copa.
Fue en ese momento que José tuvo un sueño en el que las once estrellas del cielo, que representaban a sus hermanos, se inclinaban ante él. También tuvo otro sueño en el que una sola espiga de trigo, que representaba a José, estaba en el centro de once espigas, que representaban a sus hermanos, y las once espigas se inclinaban ante la espiga de José.
Cuando sus hermanos llegaron ante él para devolver la copa, José les preguntó acerca de los sueños que había tenido. Los hermanos estaban sorprendidos y un poco asustados por los sueños, y José les explicó que los sueños significaban que ellos se inclinarían ante él, y que José tenía un papel importante que desempeñar en el plan de Dios.
En este caso, los sueños de José no solo fueron una interpretación, sino también una profecía. Eventualmente, José se reconcilió con sus hermanos y perdonó por lo que le habían hecho. La historia de José y sus hermanos es un ejemplo de cómo incluso los sueños más extraños pueden tener un significado profundo, y cómo la interpretación de sueños puede ser una herramienta poderosa para la comprensión de nosotros mismos y nuestro destino.